Darío Palomo , nacido en Toledo un 25 de Marzo del siglo pasado, es una referencia en cuanto a la composición de música para obras audiovisuales. A lo largo de su trayectoria profesional ha compuesto más de una treintena de bandas sonoras para obras audiovisuales, incluyendo largometrajes, cortometrajes, series de TV, documentales y videojuegos. Entre sus trabajos destaca la música compuesta para la longeva serie de Antena 3 “Amar es para siempre”, escribiendo la música de de sus 2.300 capítulos: o la banda sonora del último largometraje del director americano Jordan Taratoot, The caged, la serie #Luimelia y Luimelia 77 o el último Documental de Atrevida Producciones para el programa de TVE 2 Imprescindibles sobre Emilio Herrera , que obtuvo el "premio de la música para el audiovisual español" a la mejor música electroacústica.

Darío empezó sus estudios en su pequeño pueblo con un profesor local, donde “comencé a tocar el clarinete y aprendí a leer música básica. Más tarde ingresé en el conservatorio, primero en el “Jacinto Guerrero” de Toledo y después en el Conservatorio de música de Alcázar de San Juan, donde terminé grado profesional. Continué mis estudios relacionados con el sonido y la música para cine en Madrid.” Mientras estudiaba solfeo, coral, armonía y clarinete en el conservatorio de Alcázar de San Juan Darío formó un grupo de música New Age, “estilo que me fascinaba por la creación de atmósferas y otras sonoridades, en el que componía, tocaba teclados y sintetizadores”.

Entre las influencias musicales de Darío a la hora de escribir música se cuentan “los compositores cinematográficos clásicos de las grandes obras, pero con algunos matices personales y cambios que uno sufre a lo largo de su trayectoria y que le desvían de esas primeras influencias, a veces para bien y otras para mal”.

Hace más relevante su elección musical el hecho de que, como apunta Darío, es reseñable “la poca importancia, que a veces se le presta a la música y a la producción de la misma para el medio audiovisual.” Para paliar este hecho y mejorar las condiciones de los músicos profesionales en este ámbito Darío propone “que la CNMC permitiera crear o recomendar al menos unas tarifas mínimas para poder poner un suelo que también pueda servir de referencia para los nuevos autores que se incorporan al mercado, ya que este es un oficio muy pasional y en el que, sin referencias tarifarias, puedes incurrir, queriéndolo o no, en competencia desleal para con el resto de profesionales”.

Otra media deseable para este colectivo, siempre según Darío, sería que “que la cesión editorial obligatoria a la que te someten las productoras y editoriales de los medios audiovisuales, simplemente por ser el medio de difusión, desapareciera o aminorara su porcentaje, ya que constituye a todas luces un abuso, es muy poco ético y ,además, se da la circunstancia de que en otros países de nuestro entorno no existe.”

Un factor más a contemplar es la irrupción de la Inteligencia Artificial y el innegable impacto que pueda llegar a tener en todos los ámbitos de la expresión artística y, en particular, en el la música: “Creo que la IA es una realidad imparable que va a afectar a todos los sectores de la sociedad y en el campo de la música audiovisual se encargará de los fondos instrumentales y de la música de poca relevancia. Sin embargo, creo que en las grandes producciones audiovisuales -donde hay que contar una gran historia-, se va a seguir necesitando la IH (Inteligencia Humana) para poder crear esas grandes obras audiovisuales que tienen que dejar huella”.

Actualmente, Darío se encuentra inmerso “en el proceso de creación de la música para un documental sobre el Sahara y la marcha verde y preparando una suite para orquesta con diversos fragmentos de música de obras audiovisuales que he compuesto a lo largo de mi carrera -Los fabulosos hermanos Abbozzi, The Dragon Nindenn Ka-Yh, Amar es para siempre y Emilio Herrera- que será interpretado por la Universal Symphony Orchestra el 16 de Agosto de este año en Calpe (Alicante), dentro de la sección Made in Spain del Festival Internacional de música de Cine SonaFilm, además de otros proyectos que ando preparando y que, por el momento, no puedo revelar”

Darío revela que no conoció a SEDA como una nueva entidad de gestión “nueva”, sino que “para mi es la entidad esperada desde hace tiempo fruto de un deseo colectivo de autores que soñaba con construir una entidad sencilla, efectiva, humilde y transparente. SEDA aporta tranquilidad, seriedad, compromiso, transparencia y seguridad en la gestión de mis obras.

Puedes conocer más acerca de Darío Palomo y su obra musical en su sus perfiles de Spotify, Facebook e Instagram.